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Por Javier Polvani Los maestros rechazaron la oferta salarial del gobierno de llevar el salario mínimo a $2.490 y la conducción del SUTE anticipó que lo más probable es que concrete un paro con movilización el martes, primer día de clases. El gremio anunció por anticipado este desenlace -debía comunicarlo mañana a la subecretaría de Trabajo- como una especie de guiño al gobierno, que de esta manera tiene un mínimo margen de tiempo de elevar otra propuesta para intentar revertir la decisión de los docentes de parar el martes (el lunes es feriado). Este jueves en la mañana los delegados de cada establecimiento educativo llegaron con el mandato de sus compañeros a los plenarios departamentales convocados por la entidad gremial. Un sondeo exhaustivo del secretariado provincial del gremio docente fue suficiente para detectar el alto grado de rechazo que cosechó la propuesta oficial entre los docentes en sus lugares de trabajo. Según lo previsto, el viernes a las 17, los paritarios del SUTE tienen que comunicar oficialmente en la Subsecretaría de la decisión del plenario convocado para ese día en la mañana. Si no se hubiese adelantado el anuncio público del rechazo de los docentes a la oferta oficial, el gobierno se hubiese quedado sin ninguna chance para intentar enfriar la medida de fuerza. Como se dio el anuncio, la administración provincial podría mejorar la oferta en la tarde del jueves para que los docentes discutan el nuevo ofrecimiento el viernes en las escuelas, de lo contrario, ese día directamente se resolverá los alcances del paro del martes. “Es muy probable que en el plenario de mañana (viernes) se convoque a un paro con movilización para el 28 de febrero”, dijo Javier Guevara, secretario general del SUTE, en una conferencia de prensa convocada de urgencia cuando se comprobó que la propuesta oficial no tenía chances de ser aceptada en las escuelas. En la provincia hay alrededor de 50.000 docentes y por el sistema de decisión que tiene el sindicato todos opinan en sus lugares de trabajo antes de que se cierre una decisión gremial. “Hoy estamos dando esta información para llegar a todos los compañeros que han debatido la propuesta en las escuelas”, agregó Guevara, quien puso en dudas la posibilidad de que alcance el tiempo para tratar en las escuelas una potencial mejora de la oferta oficial antes de que se produzca la medida de fuerza que “seguramente se votará en el plenario”. Si bien el viernes recién se decidirá cuál será la medida que se tomará, Guevara estimó que lo más probable es que se haga un paro el primer día de clases, el martes de la semana que viene. Por eso, no dan los tiempos para que el gobierno logre revertir la situación con una nueva propuesta.
Por Javier Polvani Los maestros rechazaron la oferta salarial del gobierno de llevar el salario mínimo a $2.490 y la conducción del SUTE anticipó que lo más probable es que concrete un paro con movilización el martes, primer día de clases. El gremio anunció por anticipado este desenlace -debía comunicarlo mañana a la subecretaría de Trabajo- como una especie de guiño al gobierno, que de esta manera tiene un mínimo margen de tiempo de elevar otra propuesta para intentar revertir la decisión de los docentes de parar el martes (el lunes es feriado). Este jueves en la mañana los delegados de cada establecimiento educativo llegaron con el mandato de sus compañeros a los plenarios departamentales convocados por la entidad gremial. Un sondeo exhaustivo del secretariado provincial del gremio docente fue suficiente para detectar el alto grado de rechazo que cosechó la propuesta oficial entre los docentes en sus lugares de trabajo. Según lo previsto, el viernes a las 17, los paritarios del SUTE tienen que comunicar oficialmente en la Subsecretaría de la decisión del plenario convocado para ese día en la mañana. Si no se hubiese adelantado el anuncio público del rechazo de los docentes a la oferta oficial, el gobierno se hubiese quedado sin ninguna chance para intentar enfriar la medida de fuerza. Como se dio el anuncio, la administración provincial podría mejorar la oferta en la tarde del jueves para que los docentes discutan el nuevo ofrecimiento el viernes en las escuelas, de lo contrario, ese día directamente se resolverá los alcances del paro del martes. “Es muy probable que en el plenario de mañana (viernes) se convoque a un paro con movilización para el 28 de febrero”, dijo Javier Guevara, secretario general del SUTE, en una conferencia de prensa convocada de urgencia cuando se comprobó que la propuesta oficial no tenía chances de ser aceptada en las escuelas. En la provincia hay alrededor de 50.000 docentes y por el sistema de decisión que tiene el sindicato todos opinan en sus lugares de trabajo antes de que se cierre una decisión gremial. “Hoy estamos dando esta información para llegar a todos los compañeros que han debatido la propuesta en las escuelas”, agregó Guevara, quien puso en dudas la posibilidad de que alcance el tiempo para tratar en las escuelas una potencial mejora de la oferta oficial antes de que se produzca la medida de fuerza que “seguramente se votará en el plenario”. Si bien el viernes recién se decidirá cuál será la medida que se tomará, Guevara estimó que lo más probable es que se haga un paro el primer día de clases, el martes de la semana que viene. Por eso, no dan los tiempos para que el gobierno logre revertir la situación con una nueva propuesta.